Quiero confesar que eres mi autor favorito. Me hice adicta tanto a la prosa como al verso, a las rimas que suben como burbujas y me hunden más profundo en ti. Quiero confesar que me muero por amanecer junto a todo eso cada día, por que sientas como despierta mi piel con cada palabra tuya, por ver en tus ojos cuando nace una idea y seguir el proceso hasta que se convierte en letras y vienen a mí y me dejan ese sabor dulce y amargo en la boca, que le da vida a mis manos, que retuerce mi vientre y me hace sentirte.
Dichosa yo que te creo para mí. Dichosa yo que en mi universo soy tu única musa y lectora.